¿Qué es la escala BVD/ Barthel?
Valorar la dependencia física de un paciente es una labor rutinaria en centros médicos, unidades de rehabilitación, clínicas geriátricas y, también, antes de prestar un servicio de cuidados paliativos en casa en Madrid.
Con esta valoración se pretende saber cuánto puede hacer una persona por sí misma y cuánto no. ¿Pero en base a qué se realiza esta evaluación? Pues existen diferentes escalas de medidas de la dependencia funcional que se han estandarizado en el mundo y una de ellas es la escala BVD/Barthel. Esta escala se utiliza para determinar el grado de dependencia de un paciente en función de la ayuda que requiere para realizar diez acciones básicas diarias. Te lo contamos en profundidad en este post.
¿Cómo se mide el grado de dependencia?
La escala BVD/Barthel define 10 acciones que podemos considerar rutinarias del día a día y las evalúa con una puntuación de 10, 5 o 0 en función del grado de ayuda que necesite una persona para poder realizarlas. 10 equivaldría a no necesitar ninguna ayuda, 5 a una ayuda parcial y 0 a una ayuda total.
La suma de las puntuaciones obtenidas en esas 10 acciones determinará el grado de dependencia que tiene un paciente de tal forma que:
- Puntuación inferior a 20: totalmente dependiente.
- Puntuación entre 40 y 55: dependencia moderada.
- Puntuación mayor de 55: dependencia leve.
- Puntuación de 100: independiente.
Esta escala es una de las más utilizadas en el mundo para valorar la dependencia funcional de los pacientes, ya sea en hospitales, para solicitar el ingreso en una residencia geriátrica o para atender a pacientes en su propia casa. Por eso para nosotros es importante que se realice este test y así saber en qué grado de dependencia se encuentra el enfermo de cuidados paliativos que vamos a atender en su domicilio en Madrid.
¿Cuándo surge la escala BVD/Barthel?
Este sistema para medir de manera estandarizada el grado de dependencia funcional de una persona fue ideado en el año 1955 por Barthel y Mahonney.
Su objetivo era evaluar a sus pacientes neuromusculares y musculoesqueléticos para así poder clasificarlos y proporcionarles una atención a medida. Para crear esta escala tuvieron en cuenta tanto a médicos como a enfermeros y fisioterapeútas.
Con los años, se ha convertido en uno de los tests más utilizados en el mundo, siendo el medidor por excelencia de la capacidad de una persona para realizar actividades básicas de la vida diaria. En nuestro país es la escala más utilizada, especialmente en servicios de geriatría y rehabilitación.
A continuación podrás consultar la tabla de evaluación que da lugar a esta escala tan necesaria hoy en día, especialmente para profesiones como la nuestra en la que es fundamental conocer el estado real del paciente. Como expertos en servicios de cuidados paliativos en casa en Madrid, la dependencia física extrema convierte este momento en uno mucho más duro si cabe.
En cualquier caso, si quieres conocer más sobre este test de evaluación o simplemente quieres conocer cómo afrontamos nuestro trabajo ante la llegada de un nuevo paciente crónico o terminal, no dejes de preguntar al equipo de Alborea.